Todos hemos pensado alguna vez en
nuestro futuro, tanto inmediato como lejano. La mayoría de personas nos vemos
dentro de 10 años en situaciones idílicas, perfectas, de película. A mí con 28
años me gustaría haber acabado ya mis estudios completos que contarán de: el
Grado de Educación Primaria, el grado de Educación Infantil y un Postgrado de Docencia
de la Religión Católica en Educación Infantil y Primaria.
Me encantaría estar trabajando en el
colegio en el que estudié la ESO y el Bachillerato, el Pinar. Allí estuve 6
años, y puedo decir que fueron los mejores de mi vida. Estudié muy a gusto así
que trabajar en ese colegio sería fantástico.
Dentro de 10 años me veo viviendo en
mi propia casa con mi marido, un hombre que me ame y sobretodo que me respete.
Casada con alguien que me quiera tal y como soy. No me gustaría que entre mi
pareja y yo se perdiese esa ilusión del primer beso, esa magia que se siente
cuando miras a quien amas, y ese cosquilleo en la barriga cuando nos besemos.
No tengo claro cuántos hijos tendré, pero el número es algo que no me preocupa,
ya llegarán cuando sea el momento adecuado.
Con 28 años ya seré una mujer
madura, adulta y preparada para afrontar todos los obstáculos que la vida me
ponga delante.
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